Chris Cornell y un fanático llamado Diego Osorio La semana pasada (exactamente el 17 de mayo de 2017) Chis Cornell decía adiós al planeta que lo vio nacer y crecer. Aquel día, muchos de sus fanáticos no creímos por un segundo el anuncio de su muerte en los medios de comunicación; pensamos que era un rumor mediático o que era un asunto netamente publicitario de la gira de conciertos de Soundgarden realizaba en los Estados Unidos. A esas alturas, era mejor pecar por inocencia y reírse - con las manos en el estómago - del “error noticioso” que surgía en los medios amarillistas sobre la muerte de Cornell que rendirse ante la fatal verdad, la cual caía encima de nosotros como un balde de agua-caca. Le puede interesar: Sexo y Rock and Roll: la combinación ideal Yo estaba entre esos incautos que no creía en la noticia una vez anunciada. Desde las 06:00 a.m. - que oí de su muerte en la radio-, hasta las 09:00 a.m. – cuando llegue a la oficina – sentí que entraba, a paso l
Donde la onda rock es protagonista.